viernes, 21 de mayo de 2010

DELE

Este jueves y viernes he sido por primera vez miembro del tribunal de los DELE. Ha sido toda una experiencia tener que calificar y entrevistar oralmente a candidatos de nivel inicial, intermedio y superior. Al ser mi primera vez estaba bastante nervioso y los días anteriores lo repasaba todo para poder ser lo más objetivo y justo posible a la hora de valorar. Pero durante ese tiempo no había pensado demasiado en la angustia y nerviosismo que algunos candidatos podían sentir durante la prueba oral y, la verdad es que, algunos lo han pasado un poco mal. Por eso es importante que el examinador cree un ambiente lo menos estresante posible para tratar de equilibrar la balanza y creo que, en líneas generales, no me ha salido bastante mal aunque mi percepción no es muy subjetiva.
Sin embargo, también habían candidatos que se sentían la mar de tranquilos, sabedores de que su nivel oral era suficiente para superar la prueba.
Espero que este haya sido el primero de muchos años de participación en los DELE.

miércoles, 19 de mayo de 2010

¿Crisis?

Hoy en día se habla mucho de la Crisis pero sobre todo nos focalizamos en el aspecto económico aunque el personal no esté, para nada, pasando tampoco por un buen momento. Sin embargo, en estas límeas, me referiré a mi crisis profesional.
Muchos colegas de profesión me han dicho que, tarde o temprano, los profesores pasan por etapas ascendentes o positivas y descendentes o destructivas. Hay muchas variables que pueden conducir la balanza hacia uno u otro aspecto: la formación recibida y contínua, el alumnado, el centro en el que se trabaja, las hojas amarillentas, etc. La lista es muy extensa.
Desde hace un tiempo yo ando por el filo de la navaja, planteándome si tras años de docencia y de estudios quiero o no continuar en las aulas.
Me encanta mi trabajo pero me encuentro estancado. Lo ¿curioso? es que cuanta más información o formación tengo, más dudas me asaltan y menos avanzo. Era de la comunicación. Paso bastantes horas en la red en busca de respuestas pero solo me invaden preguntas de todo tipo: metodológicas (¿lo estaré haciendo bien?, ¿es ésta la secuencia idónea para este tipo de alumnos?, logísticas (¿puedo yo llevar esto al aula? ¿seré capaz de utilizar este programa con mis alumnos/en mi centro?)...
Un ejemplo: Siempre que puedo trato de introducir TICs en el aula porque creo que pueden ser aspectos motivadores.
Recientemente, con dos grupos diferentes, he creado blogs para que tengan un contacto con el español fuera del aula pues no están en situación de inmersión. Les digo que será un modo de interactuar con otras personas y de practicar lo aprendido (o no, ir más allá). Saben que yo creo el blog (no les planteé que lo crearan ellos porque nos vemos dos veces a la semana y todos trabajan en lugares diferentes) pero que él les pertenece a ellos. Tienen libertad de cambiar el diseño, de escribir lo que quieran, de añadir fotos, vídeos, a parte de las tareas que yo les pueda pedir.
Sin embargo, un grupo no estaba, para nada, motivado una vez empezado el blog, y con el que tengo actualmente parece estar pasando lo mismo. La idea les interesa pero luego no participan. ¿No habré presentado correctamente la idea? ¿No habré transmitido eficazmente lo que el blog les puede aportar? ¿No les habré motivado lo suficiente?
Sigo, pues, en busca de respuestas, pero las fuerzas flaquean.